sábado, 4 de febrero de 2012

La complejidad social y el cambio

Un sistema es un conjunto de elementos relacionados entre sí. El sistema será más complejo si sus partes son complejas o abundantes. Mi idea es analizar a la sociedad de manera sistémica y pensar cómo es (Si lo es) posible el cambio. Creo que de ello pueden salir algunos interrogantes interesantes.

1 - ¿A qué llamar "sociedad"?
Pienso que hablar de una "Sociedad" es algo muy vago. Pues el sistema social está formado por subsistemas complejísimos. A fin de cuentas, podemos pensar que la familia es la sociedad menos compleja del sistema social completo. Y así podríamos empezar con familia, barrio, municipio, provincia, país, continente, mundo. Pero esta cadena es muy poco específica por su falta de criterio, es decir, se puede hablar e sociedades dependiendo de criterios varios. Yo utilicé uno (¿Cuál?) pero también se puede hablar de otro tipo de sociedades. Lo que diferencia el criterio para llamar sociedad a un grupo quizás sea la calidad y cualidad de la relación de ese elemento con el resto y su ubicación en el sistema total. 

2 - Los elementos.
Cada persona es un mundo. Todas las personas son distintas y complejas (Algunos más que otros). Esto hace que la sociedad más pequeña sea de difícil gestión (Relaciones de padre e hijo, de pareja). Teniendo en cuenta que las unidades, que no forman un conjunto, ya son complejas, eso alza el nivel de complejidad bastante ya en el la mínima sociedad. Podríamos inventar (Al mejor estilo de la antropología de salón) una manera de medir la complejidad. Basándonos en algún tipo de test podríamos poner una puntuación del 1 al 10. Supongamos ahora una pobre estadística de un promedio de 5 per cápita. En mi familia habría una complejidad de 20 puntos. En la ciudad que vivo habría un millón y medio de puntos y en el país unos dos mil docientos millones. Dejando de lado este invento inútil, creo que ya se entiende la complejidad de la sociedad (Al nivel más simple, pues no contamos ningún factor afectando a los individuos).

3 - Los elementos complejos.
Cada familia es un mundo. Cada barrio es un mundo. Cada país es un mundo. Hay una figura legal sobre los usos y costumbres la cual puede volver ley un uso o una costumbre. Esto quiere decir que la administración pública analiza cada elemento de la sociedad por separado para poder trabajar sobre ellos.

4 - Los factores.
Hasta ahora sólo he puntualizado mi atención sobre las personas. Lo interesante (O lo complejo) es que las personas están inmersas en alguna realidad. Voy a trabajar con la Argentina. Los factores son un elemento más abstracto, aún así muy real y hasta a veces tangible, que conforma la realidad en la que vive una persona. El factor más básico es lo material: Espacio físico, dinero, ropa, comida, etc. Pero hay vastísimos factores como política, ética, economía, educación, etc. Estos últimos, al ser más abstractos, son más complejos. Es decir el factor "Economía" no es más que un título de una extensa lista de elementos que lo conforman. Las relaciones entre los propios factores son también complejas. No podemos negar las relaciones entre política y economía, por ejemplo.

5 - El efecto mariposa.
Conocido proverbio chino: "el aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo". Un cambio en un factor modifica los otros. Por ejemplo, las políticas elegidas por el gobierno de turno dan, o no dan, presupuesta para salud, educación, etc. Siempre en contacto con el tándem económico. El gobierno de turno tiene el poder (Legitimado por la constitución) de generar, o no, cambios. Lo complejo con las políticas es que no siempre funcionan como lo esperado, pues no hay un "Manual general de políticas". Y no lo hay porque no hay políticas que satisfagan las necesidades de TODAS las poblaciones. Jugando con la metáfora, el gobierno sería la mariposa.

6 - El sistema de representación.
Afortunadamente, votamos a quienes nos representan. Esto quiere decir que los votantes, elementos más pequeños del sistema social, somos larva de la mariposa que genera cambio. El problema es que siendo tantos votantes y tan pocos candidatos sería complicado encontrar un candidato que nos represente en un 100%. Por ejemplo, yo apoyo el modelo, pero no niego que a veces se equivoca... ¿Se equivoca o no me representa en un 100%? Además, se gana por mayoría, es decir que las minorías son representadas por personas a quien no eligieron y que probablemente no haya una afinidad ideológica tan buena.

7 - El cambio.
La pregunta que me hago una y otra vez es esta: ¿Por dónde empieza el cambio: por arriba o por abajo? Con esto quiero decir que no sé si se debe hacer un trabajo social en las villas, misiones en las provincias y este tipo de actividades o  empezar una carrera política para que haya un candidato que me represente totalmente (No creo, yo no me votaría). O buscar los instrumentos institucionales que me permitan presentar proyectos de ley para que lleguen al gobierno. Pero... ¿Y si no sólo el gobierno fuera la mariposa? Quizás todos nosotros somos potenciales agentes de cambio.

8 - El orden.
Cuando alguien tiene que ordenar algo (La cocina, el cuarto, un galpón) y el desorden es mayúsculo, uno se pregunto ¿por dónde empiezo? Yo creo que con un país pasa lo mismo. ¿Empezamos por la educación? ¿Empezamos con la desocupación? ¿Por la salud? ¿Deuda externa? Más complicada será la elección pare el gobierno pensando en las necesidades más "Urgentes" de la sociedad. Porque nosotros, la población del conurbano, con nuestro ritmo de vida, tan materialistas, tan posmodernos, queremos todo YA. No podemos esperar por un proyecto seguro a largo plazo. Preferimos un balde en la gotera que a un techista. La agenda política no es algo sencillo.

9 - El factor humano.
No quiero ponerme pesado hablando de ética y moral. Incluso dejaré de lado la corrupción. Quiero hacer foco en el egoísmo. Nuestra sociedad es bastante individualista, cada uno por su lado y "Sálvese quien pueda". En la toma de decisiones de algunos se ve. Hay ciertos políticos que utilizan sus potestades constitucionales para el beneficio propio y/o de unos pocos. La historia argentina es un tire y afloje entre gobierno y gobierno, uno hace y el otro deshace. Hoy por hoy, hay una continuidad política, bastante coherente. Y eso podría ser porque la mayoría de las decisiones son en beneficio del pueblo y en detracción del mismo como en el Gobierno de la Ciudad, en el cual las decisiones son tomadas en beneficio de la clase alta, o parte de ella. En definitiva, las personas a quienes votamos y nos representan, son humanos y tienen ideas distintas, lo que hace que algunos de ellos tomen decisiones egoístas.

10 - La complejidad y el cambio.
Siendo la administración de una sociedad tan difícil por su inherente complejidad ¿Cómo lograr el cambio? Creo que en la Argentina se tiene que dar de a poco, poniéndole fichas a la educación. No creo que la Argentina pueda hacer una revolución (Al mejor estilo cubano). Pero sí creo que necesitamos una revolución, pero una revolución en los valores de la sociedad. 

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Sin caer en subjetivismos y sin plantear una ética universal, hay ciertas actitudes que CASI NADIE negará como "Buenas". Pongámonos las pilas y seamos buenos. Buenos, no boludos. Solidarios, no boludos. Seamos entre todos, no de a uno. Construyámos con responsabilidad, con conocimiento, no con ignorancia, no con negligencia. Seamos coherentes, no hipócritas. Seamos patriotas, nacionalistas, no vendamos la patria.

martes, 2 de agosto de 2011

DescifrArte II

Semiología del arte.

La producción artística es producción simbólica. Es decir, el objeto en sí no es arte sino el valor que se le da. Un paisaje no es arte, pero una pintura de él sí. Esa pintura, ese lienzo no es arte. El arte está en el valor que se le da a la combinación de esos insumos. Este razonamiento sigue a todas las artes. El sonido de una canción no es arte, sino la ordenación (Que un autor creó) percibida por el oyente. Un mármol con forma no es arte, sino el símbolo percibido por una persona.

Lo interesante es que cualquier objeto podría ser obra de arte así. Duchamp resignificó un migitorio y lo hizo arte, sin siquiera pintarlo, tallarlo, etc.

La interpretación del símbolo es social y subjetiva. Por un lado es social, pues todos llevamos un bagaje cultural más o menos parecido y socialmente diremos esto de una obra y aquello de otra. Pues hay formas artísticas aceptadas socialmente.  Aún así es subjetiva pues siendo la obra un símbolo, o mejor, un signo. Lo llamaré signo artístico. El signo artístico, al igual que otros tipos de signos (El lingüístico, si se me permite), tiene multiacentuación (Voloshinov). Esto quiere decir que un signo artístico es interpretado de distinta manera por cada observador. La misma obra significa algo para uno y otra cosa para otro. Cada uno le da un acento distinto.

Lo importante del valor social de la percepción es que hará que todos más o menos interpreten igual y estarán relativamente influidos por un mercado de arte que es real. Cuando un artista logra ingresar su producción en el mercado se vuelve aceptada socialmente, al menos por el segmento del mercado. Entonces logra una suerte de éxito social que valorará su obra simbólica y económicamente por supuesto.

Creo que es fundamental entender entonces que la producción de signos artísticos y la percepción de los mismos son dos tareas totalmente diferenciadas. Trataré ambas tareas en apartados específicos.

Se me hace evidente ahora que la evaluación del signo le da valor de signo artístico o no. Entonces el juez de arte no es el productor sino el receptor. Es importante aclarar que el artista es a la vez receptor de su producción.

Creo que sería proclamar que no hay un criterio sino formal de arte. Sin universalidad, claro está. Nunca habrá algo que innegablemente por todos los hombres de todos los tiempos sea arte. Machacaré un poco más con esto: La percepción es social, o sea cultural y cronológica. Sin embargo ciertas obras de arte encuentran un lugar en el mercado que las hace sobrevivir en el tiempo, aumentando su valor simbólico y económico. Esas obras quedan cristalizadas como "Clásicas" y supondrían un patrimonio artístico de la humanidad. Pero siguen siendo símbolos. Hoy por hoy podemos no entender cómo una pintura rupestre fue arte en su momento, o cómo una lata de sopa lo es y será gracias a cierta heurística museológica.

sábado, 30 de julio de 2011

DescifrArte I

Se habla tanto de ella, pero nadie puede definirla con claridad. El arte forma parte de la vida humana, si no es que es la vida humana misma. Voy a intentar desambigüar algunos conceptos y diferenciarlos, para aclarar mis propios pensamientos e intentar construir algo.

Cuando se pregunta qué es el arte, las respuestas son tantas vastas como almas en el orbe. Sin embargo hay ciertas coincidencias. Hay quienes dicen que todo es arte, quienes piensan que el qué es arte y qué no es estético y subjetivo, los menos son los que encuentran el qué del arte en algo más objetivo, otros relacionan al arte con la producción de ciertas personas, otros con la finalidad de la creación, otros con la técnica.

No es mi objetivo decir quién  está en lo correcto ni quién equivocado (No es que pueda hacerlo), pero puedo intentar acotar estas ideas.

Empecemos con los que dicen que todo es arte. Creo que aquí hay un problema de ambigüedad o vaguedad de los términos así como un optimismo importante. La idea de estas personas es que todo lo producido por el hombre es arte. Tengo dos cosas que acotar, primero que creo que se está hablando de cultura. La cultura en oposición a la naturaleza, es decir, creo que el hombre hace cultura. No existe el hombre inculto, pues la acción humana es cultura. Me han dicho que una servilleta impresa o un azulejo es arte porque un diseñador se sentó a pensarlos. Yo retruqué con una pregunta: ¿Un matemático que se sienta a pensar una fórmula es artista? Me dijeron que no. Acá agrego mi segunda acotación: La ambigüedad del término arte. En su origen (Y hoy en día en algunas casos) arte se relacionaba directamente con la técnica y los preceptos de cualquier disciplina: El arte culinario, el arte de la espada, el arte marcial, etc. Todas estas disciplinas son artes pero no el arte que nos interesa (¿O si?...). En definitiva de aquí aprendemos que no todo es arte y que hay varios tipos de arte. No podemos aún a esta altura decir cuál es el arte de la que hablamos.

Sigamos con los que piensan que el criterio que define qué es arte y qué no, es subjetivo. Ellos piensan que pueden decir que X obra es arte e Y obra no lo es porque les gusta o no. Se juego el lindo-feo, el me gusta- no me gusta. La trampa del subjetivismo no puede ser atacada sino con el objetivismo. ¿No caeríamos así de nuevo en decir que todo es arte o que nada es arte? En cualquier caso podríamos encontrar el equilibrio en un intersubjetivismo (Sabiendo que el objetivismo no es sino esto) y pensar que las obras aclamadas por mayorías son arte y las otras no. Es difícil de creer en esto, el subjetivismo siempre tiene este efecto. Con todo esto no tendríamos una, sino infinitas respuestas, una vez más, de la pregunta que nos compete. ¿Qué es el arte? Y no lo sabremos aún. Incluso se puede entender un criterio social. Hay quienes dirían que la cumbia no es arte, que el reggaeton tampoco, que la música electrónica tampoco, etc.

Luego tenemos a los objetivistas que encuentran leyes, reglas y normas para el arte. Si X obra cumple los requisitos es arte, si no, no. Bueno esto le quita mucha humanidad al arte. Si una computadora produce una obra  según las reglas sería una artista. Una pintura de un paisaje sería arte pero el paisaje en sí no. Aunque el paisaje cumpla las reglas no es humano. Un protector de pantalla que genera imágenes abstractas no hace arte sino tristes matemáticas coloridas.

A continuación tenemos a los que piensan que los que hacen arte son los artistas. (Doh). La idea es que un artista cristalizado aunque produzca algo "Desagradable", ése producto, sería arte, pues fue producido por un artista. Los no artistas por más que produzcan algo no hacen arte, sino que tienen un hobby. 

La finalidad es uno de los puntos más importantes. ¿Es arte una obra sólo si tenía una finalidad? Un ensayo de una canción no tiene una finalidad de transmisión, sino de ensayo. ¿No es arte entonces? ¿Una melodía improvisada no es arte? Así hay miles de casos. No creo que el artista esté siempre buscando transmitir un mensaje claro. Sino la producción sería mucho más limitada.

En algunos ámbitos la técnica es muy importante. En general es el ámbito más clasicista, dónde la técnica es parte fundamental del arte, en oposición al sentimiento.

Ya aclararemos más las ideas. Por ahora presentamos puntos de vistas y los acotamos. No busco LA respuesta porque no la hay, quizás ni tengamos una respuesta. Pero plantear interrogantes nunca está de más.