martes, 2 de agosto de 2011

DescifrArte II

Semiología del arte.

La producción artística es producción simbólica. Es decir, el objeto en sí no es arte sino el valor que se le da. Un paisaje no es arte, pero una pintura de él sí. Esa pintura, ese lienzo no es arte. El arte está en el valor que se le da a la combinación de esos insumos. Este razonamiento sigue a todas las artes. El sonido de una canción no es arte, sino la ordenación (Que un autor creó) percibida por el oyente. Un mármol con forma no es arte, sino el símbolo percibido por una persona.

Lo interesante es que cualquier objeto podría ser obra de arte así. Duchamp resignificó un migitorio y lo hizo arte, sin siquiera pintarlo, tallarlo, etc.

La interpretación del símbolo es social y subjetiva. Por un lado es social, pues todos llevamos un bagaje cultural más o menos parecido y socialmente diremos esto de una obra y aquello de otra. Pues hay formas artísticas aceptadas socialmente.  Aún así es subjetiva pues siendo la obra un símbolo, o mejor, un signo. Lo llamaré signo artístico. El signo artístico, al igual que otros tipos de signos (El lingüístico, si se me permite), tiene multiacentuación (Voloshinov). Esto quiere decir que un signo artístico es interpretado de distinta manera por cada observador. La misma obra significa algo para uno y otra cosa para otro. Cada uno le da un acento distinto.

Lo importante del valor social de la percepción es que hará que todos más o menos interpreten igual y estarán relativamente influidos por un mercado de arte que es real. Cuando un artista logra ingresar su producción en el mercado se vuelve aceptada socialmente, al menos por el segmento del mercado. Entonces logra una suerte de éxito social que valorará su obra simbólica y económicamente por supuesto.

Creo que es fundamental entender entonces que la producción de signos artísticos y la percepción de los mismos son dos tareas totalmente diferenciadas. Trataré ambas tareas en apartados específicos.

Se me hace evidente ahora que la evaluación del signo le da valor de signo artístico o no. Entonces el juez de arte no es el productor sino el receptor. Es importante aclarar que el artista es a la vez receptor de su producción.

Creo que sería proclamar que no hay un criterio sino formal de arte. Sin universalidad, claro está. Nunca habrá algo que innegablemente por todos los hombres de todos los tiempos sea arte. Machacaré un poco más con esto: La percepción es social, o sea cultural y cronológica. Sin embargo ciertas obras de arte encuentran un lugar en el mercado que las hace sobrevivir en el tiempo, aumentando su valor simbólico y económico. Esas obras quedan cristalizadas como "Clásicas" y supondrían un patrimonio artístico de la humanidad. Pero siguen siendo símbolos. Hoy por hoy podemos no entender cómo una pintura rupestre fue arte en su momento, o cómo una lata de sopa lo es y será gracias a cierta heurística museológica.

1 comentario:

Mariano dijo...

estaba leyendo algo sobre temas aledaños a los de este post y encontré la siguiente descripción:

"Las reflexiones que componen este texto maduraron en situaciones disímiles. Sus figuras son las de la esquirla y la discontinuidad. Sus cometidos viajan en reversa, buscan un ritmo rapsódico, una prosa pixelada, una fuga birlibirloque que conforme avanza, retrocede. Situada en los intersticios que pergeñan lo contemporáneo, esta encrucijada transatlántica y aérea propone un diálogo imposible entre una troupe de escritores spam y otra de narradores samplers." (http://tlatland.tumblr.com/)